Amazon 1984

Amazon Kindle 1984

El Ministerio de la Paz se ocupa de la guerra; el Ministerio de la Verdad, de las mentiras; el Ministerio del Amor, de la tortura, y el Ministerio de la Abundancia, del hambre. Estas contradicciones no son accidentales, no resultan de la hipocresía corriente. Son ejercicios de doblepensar.”

George Orwell: fragmento de ‘1984’

Veinticinco años después de esos tiempos imaginados por Orwell, la realidad sigue inspirándose en esta novela… El Agregado Cultural se ocupa de obstruir la difusion de la cultura; La Industria de la Música se ocupa de criminalizar a los melómanos; Los Editores de Libros se ocupan de perjudicar a las bibliotecas, y las Nuevas Librerías Digitales, de borrar libros a sus lectores. Estas contradicciones no son accidentales, no resultan de la hipocresía corriente. Son ejercicios de doblepensar…

Un incipiente escándalo recorre la red, Amazon, la tienda virtual mas grande del mundo, decidió entrar discretamente a las bibliotecas virtuales de sus usuarios, para borrar algunos libros. Estas bibliotecas se llaman ‘Kindle’, un dispositivo que utiliza Amazon para vender sus libros electrónicos. Aunque todavía no están claras las causas, el hecho es que una editora le pidió a Amazon que cancelara la comercialización electrónica de algunos sus libros, como ‘1984’ o ‘Rebelión en la Granja’ (vaya paradoja), y los retirara del sistema. Fiel a la editora y no a sus usuarios, Amazon obedeció.

Kindle es una plataforma de comercialización intoxicada de DRM y con la filosofía de la nube, donde el usuario queda anclado y controlado por una red centralizada. Aunque el nucleo del sistema operativo de cada dispositivo es libre (gnu/linux), el resto es cerrado. La combinación entre DRM y red centralizada, le permite a Amazon controlar el acceso a los documentos: los libros que vende Amazon estan encriptados, y sólo Amazon tiene la llave. En rigor el usuario no compra un libro, mas bien lo alquila. Cualquier semejanza con algunas profecías distópicas, no es ninguna coincidencia.

Las máquinas no construyen la Historia, la hacen los humanos que construyen las máquinas. El salto cualitativo que implica pasar del libro de papel al libro electrónico es la posibilidad de copiar y multiplicar, no vigilar y castigar. La tecnología puede ser igual de efectiva en ambas orillas ideológicas, las decisiones no son técnicas, sino políticas.


Actualización

  • El Pais publicó la noticia con mas información, donde, entre otras cosas, se menciona que ‘Amazon ya lo ha hecho otras veces’ (!). También un analisis legal del asunto, como es de esperar, la Ley de estos tiempos esta a favor de los que queman libros y no de los que los promueven.
  • Parece que la idea de que ‘borrar libros es quemar libros’ va prendiendo.
  • En la nota del New York Times se menciona el caso de Justin Gawronski, “un estudiante de 17 años de Detroit, que estaba leyendo ‘1984’ en Kindle como una asignatura de verano, perdió todas sus notas y anotaciones cuando el libro fue borrado. –ellos no solo tomaron el libro, ellos robaron mi trabajo– dijo Justin”… digamos que fue una experiencia por demas ilustrativa y didáctica con relación a la asignatura recibida, aprender lo que significa vivir en una sociedad donde un gran hermano decide que archivos pueden estar o no en tu computadora.
  • Justo por estos dias Linus Torvals realizó algunas declaraciones, abogando por desligar lo técnico de lo político en el ambito del desarrollo de software, sin embargo hechos como los descriptos en este post, ponen de manifiesto lo riesgoso de aquel aséptico abordaje, como muy bien lo remarcan aqui.
  • En Versus, nos recuerdan: te lo dije! por allá en 2007: “… a mi me gusta cambiar libros con mis amigos. Y compro más de los que puedo leer, pero al menos puedo hacer con ellos lo que quiero, no lo que Amazon no me prohíba hacer”.