Hoy sábado 9 de abril, 20 países de Iberoamérica se unen en el festival de Software Libre más grande del mundo. El “FLISoL”, Festival Latinoamericano de Instalación de Software Libre. Se realizará en más de 200 ciudades de todo el continente, con sedes en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, España, el Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela. En Argentina, el festival se realizará en forma paralela en 33 ciudades distribuidas por todo el país.
El evento está dirigido a todos aquellos que quieren instalar Software Libre en sus computadoras pero todavía no se animan a hacerlo solos y necesitan ayuda y asistencia de la comunidad de Software Libre. En este evento, las organizaciones locales, grupos de usuarios y organizaciones sociales vinculadas al Software Libre trabajan de manera articulada para realizar este festival en forma simultánea. El festival ofrece instalaciones y charlas que permiten acercar personas no técnicas y principiantes que deseen conocer más sobre la filosofía y los conceptos esenciales del Software Libre. Tanto las instalaciones como la participación en las charlas son libres y gratuitas.
El FLISoL en CABA
En la ciudad de Buenos Aires el Festival se realiza en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, ubicada en Avenida Córdoba 2122. Más información en el sitio de FLISoL Capital: flisolcaba.usla.org.ar. Además del festival de instalación, habrá varias actividades durante todo el sábado:
En el auditorio del primer piso habrá charlas desde las 10 de la mañana sobre ofimática libre por el profe Román Gelbort, cooperativismo y software libre por José Massón, y la experiencia del CISL según Jorge Cabezas. Durante la tarde “Wikipedia: qué, quién, cómo” por Patrcio Molina y Nicolás Giorgetti, copyright y software libre por Bea y “¿De qué hablamos cuando hablamos de libertad?” por el periodista [Ariel Torres](http://buscar.lanacion.com.ar/’Ariel%20Torres’ “estará en La Nación, pero sin duda es uno de los mas serios”).
Y en el segundo piso arrancan con el clásico de MEC “Primeros pasos en software libre”, y a la tarde Rómulo da su charla sobre “Software Libre ayudando al discapacitado”, luego “Desarrollando para «la internesss»” por Diego Cañizares y “Seguridad em linux” por Matías Katz.
Nuevo número de cultura.rwxliberado! Entrevista al legendario Bifo Berardi en su paso virtual por Fábrica de Fallas, artículos de Carolina Botero (Colombia), Rafael Cheuquelaf Bradasic (Chile, integrante del dúo electrónico Lluvia Ácida, Iris Fernández (TICs y educación), Lila Pagola sobre fotografía, Colectivo Radio Revés sobre radio y música libre, una nota sobre el festival noruego de artes electrónicas open source “Pikselfest” por Jorge Crowe, y una traducción del artículo “dimensiones de género en el desarrollo del Software libre” de Yuwei Lin.
Puede descargarse, entera o por notas desde el sitio culturarwx.net
El legislador Pinedo es un hombre que entiende a la informática como nadie: ya lo vimos defendiendo el voto electrónico por su “transparencia”; es un hombre al cual el ciberdelito lo preocupa tanto que apoyó el pedido de la ONTI para que Argentina ingrese en el Convenio sobre Cibercriminalidad y ahora impulsa una ley, bien del Primer Mundo, para que los proveedores de servicios de Internet sean responsables por los contenidos publicados o subidos por terceros que violen alguna norma jurídica, tal como la 11.723 de derecho de autor.
Este proyecto de ley, una mala copia de la Ley Sinde, en realidad trata de responder a una problemática cada vez más frecuente para los proveedores de servicios: la responsabilidad por los contenidos de terceros. Las cartas de intimación legal mandadas a los proveedores de hosting, o la denuncia a blogeros por los comentarios dejados por terceros, y similares, son la punta del iceberg de una problemática emergente. El debate legal es siempre árido y suele dividirse entre los grados y tipos de responsabilidad; si es subjetiva u objetiva y así sucesivamente.
Lo cierto es que el proyecto de Pinedo ni siquiera merece semejante debate, porque la premisa de la cual parte el proyecto está errada. En principio, no es función de un proveedor de servicios, de un ente comercial o no comercial, cumplir funciones de policía. Es sabido que el PRO tiene afinidad particular por este tipo de propuestas, tales como «Compromiso Vial Ciudadano», pero lo cierto es que no es responsabilidad ni de un ciudadano ni de un ente comercial, determinar la «ilegalidad» de un contenido del cual, en principio, no debería ni siquiera saber de qué se trata. De lo contrario viola derechos tales como la privacidad de las comunicaciones, establecidos en la Ley de Telecomunicaciones de Argentina y adherido sucesivamente en otros pactos internacionales.
Toda persona, de existencia visible o ideal, podrá promover una medida ante el juez con competencia en su domicilio con el objeto de solicitar judicialmente que se elimine y/o se restrinja y/o se bloquee el acceso a uno o más contenidos específicos -sea en forma de texto, sonido, imagen o cualquier otra información o representación- que lesionen derechos o garantías reconocidos por la Constitución Nacional, un tratado o una ley de la República Argentina. En el caso, el juez podrá ordenar las medidas requeridas en forma provisional sin haber oído a la otra parte […]
Alcanza con pensar que pasaría si esta ley se aplicara a otros ámbitos de la comunicación, para darse cuenta de lo disparatado del artículo. Cambiemos la web, por redes telefónicas:
“Toda persona, de existencia visible o ideal, podrá promover una medida ante el juez con competencia en su domicilio con el objeto de solicitar judicialmente que se de de baja el abono telefónico de un tercero cuando desde esa línea se efectuen llamados telefónicos que lesionen derechos o garantías reconocidos por la Constitución Nacional, un tratado o una ley de la República Argentina. En el caso, el juez podrá ordenar las medidas requeridas en forma provisional sin haber oído a la otra parte“.
La idea [del partido pirata sueco] caló hondo en un grupo de entusiastas argentinos: formaron el Partido Pirata e importaron punto por punto esta problemática primermundista.
De los muchos prejuicios y apreciaciones superficiales que contiene la nota, conviene aclarar dos cuestiones importantes:
En primer lugar, la problemática primermundista que pone en conflicto los derechos de los ciudadanos y las leyes que restringen el libre flujo de la información a través de las redes, no fue importada por el Partido Pirata, sino más bien, por nuestros funcionarios, jueces y legisladores, que «primermundísticamente» han optado por seguir la agenda de intereses transnacionales punto por punto (con honrosas excepciones), tanto de empresas multinacionales como de estados extranjeros, en vez de contextualizar la problemática según las condiciones sociales y económicas locales. De esos casos locales, que detallamos más adelante, es que surge nuestro interés por construir este espacio de acción política —y cultural— llamado Partido Pirata.
En segundo lugar, debe quedar claro que todo conflicto relacionado con la llamada propiedad intelectual o las regulaciones sobre internet, obedece a un esquema geopolítico global, donde los intereses de los países en desarrollo no son los mismos que los de los países centrales. Desde esta perspectiva se hace doblemente necesario el activismo político sobre estos temas —especialmente— entre aquellos, como nosotros, cuyas vidas transcurren fuera del llamado «primer mundo», quienes seremos los grandes perdedores de imponerse este esquema global que favorece la apropiación monopólica de lo inmaterial.
[…]
Por eso, una de las principales razones de la existencia de este Partido Pirata local, es generar un espacio de activismo, en sintonía con los Partidos Piratas surgidos en el resto del mundo, pero que ponga el foco precisamente en las problemáticas locales. La ley argentina de Derecho de Autor, la 11.723 conocida como la «Ley Noble» en honor a su principal impulsor, el diputado Roberto Noble —fundador de Clarín—, es una de las más restrictivas del mundo, cuenta con muy pocas excepciones, tanto que criminaliza incluso a las bibliotecas y a los bibliotecarios en el ejercicio de su actividad de preservar y dar acceso a los libros, y condena a la ilegalidad cualquier uso no autorizado de una obra: en Argentina pasar un CD comprado legalmente a formato mp3, para escucharlo en nuestro propio dispositivo portátil, es ilegal.
El otro aspecto que también mencionamos, es el ordenamiento geopólitico global subyacente en esta batalla por liberar lo inmaterial. No se limita al problema de «la piratería» y los intereses de la industria del entretenimiento, sino que involucra cuestiones como patentes sobre alimentos, genes, medicamentos o software, y que desde una perspectiva norte/sur condenan a los países del Sur a la agricultura y a la industria, mientras que los del Norte conservan el control sobre la creatividad y el valor agregado. Como meciona este artículo de Florent Latrive: «accesorios de moda diseñados en París y producidos en Túnez; computadoras concebidas en Silicon Valley y fabricadas en Asia. Y todo ello con estrictos controles fronterizos y en Internet». Un juego de ganadores y perdedores, donde no cuesta imaginar que papel ocupará Argentina.
— ¿Cómo puede colaborar la filosofía del «software libre» a la discusión sobre la monopolización informativa, la concentración de los medios de comunicación, etc.?
La regulación del software lo ubica bajo el sistema de copyright: el copyright es un monopolio sobre bienes informacionales, sobre expresiones de ideas. Muchas veces se oculta la verdadera naturaleza de los derechos de autor, pero estos no son otra cosa que monopolios artificiales otorgados por los Estados por ley. Todo monopolio es dañino a la hora de hablar de circulación de información. Este es el primer aspecto, pero no el único. También hay que entender que todo este entramado de nuevas redes informatizadas que simulan ser espacios públicos participativos no son otra cosa que redes que pertenecen a una empresa que se debe a sus accionistas, que no son espacio público real, sino mediado por los intereses de una empresa (estoy hablando por ejemplo de Facebook). Las tecnologías median demasiadas cosas hoy día, entonces democratizar su comprensión, apropiarse de sus códigos y tener la capacidad de tomar decisiones de modo autónomo es esencial. En este sentido, el Software Libre tiene mucho para aportar a la democratización de las nuevas tecnologías, que no son otra cosa que nuevos medios de comunicación.
Muy buena también la entrevista a Alejandro Kaufman sobre la Feria del Libro: […] la Feria se dejó colonizar por los medios de comunicación hegemónicos, no solamente en el sentido de que la televisión o la radio han instalado estudios y han construido el portal de ingreso a la Feria, sino también porque esos medios hegemónicos han organizado políticas culturales muy fuertes en un sentido transversal a sus productos de prensa, más allá de los suplementos culturales. Han tenido una voluntad, dentro de su proyecto hegemónico, de instalarse en la escuela, de instalarse en las artes, en la literatura, en el cine, en el teatro. Han tenido la voluntad de estructurar la agenda cultural educativa.
Lectura de “El manifiesto pirata poético” (votado en asamblea 12/11/09), entre algunos integrantes del partido pirata y el público
Contra todo intento de estigmatizacion de nuestro nombre, reivindicamos a los Piratas, la Piratería y sus luchas.
Si en aquel mundo dominado por monopolios depredadores, por la esclavitud, la autocracia y el racismo, los Piratas se dieron a si mismos igualdad, libertad, autodeterminación y auténtica convivencia multicultural, ignorando toda corrección política de su tiempo, entonces es que reivindicamos su bandera, su legado y su nombre.
Porque nosotros crecimos en la periferia de lo que algunos llaman ilegalidad, navegando caóticos mares culturales, habitando unas pocas y remotas islas liberadas, y no conocemos otra forma de organizamos que no sea bajo un principio de convivencia igualitaria: las Redes de Pares.
Resistimos también los monopolios, del conocimiento, la cultura, y el patentamiento de la vida, y asi como nos resistimos a las metrópolis del presente que depredan los recursos naturales en sus colonias: el planeta entero.
Y como buenos Piratas y Filibusteros nos parecemos en algo más a nuestros predecesores: asaltamos naves, las del egoísmo y el saqueo, para quebrar la opresión de las falsas leyes de la escasez, del copyright y sus artificiales feudos inmateriales, fraudulentos espejismos propagandísticos que nos restringen el acceso a este nuevo mundo de la abundancia multicolor, donde todos podemos crear, copiar, multiplicar y compartir.
Como Piratas que somos creemos en la libertad, en la diversidad, en la auto-organización, en la horizontalidad, en sentirnos pares e iguales, en democratizar la creación, en la libertad de expresión y pensamiento, y como nacimos compartiendo, creemos en compartir la mayor riqueza que atesoramos como humanidad: la cultura, las ideas y el conocimiento, que liberados del lastre analógico y anacrónico de la escasez, sólo queda liberarlos del pesado lastre de la codicia.
Como Piratas que somos, no somos ingenuos, y sabemos que las mismas armas digitales que nos liberan, nos pueden encarcelar, cercenar y mutilar. Por eso defendemos la privacidad, el anonimato, las redes libres y la neutralidad de Internet, como herramientas de liberación que nos permitan seguir sosteniendo nuestra autonomía, capacidad de organizarnos y resistirnos a las leyes cercenantes.
Como Piratas que somos aprendemos sobre la marcha, construimos sobre la marcha, aprendemos de las históricas luchas por la democratización del conocimiento y la libertad de expresión y aprendemos de las luchas por proteger nuestros bienes comunes, los recursos naturales: mares, vientos, llanuras y montañas.
Aprendemos que la libertad, la solidaridad y el compromiso colectivo son el único camino sustentable para seguir existiendo como seres humanos en este planeta.
Como Piratas que somos creemos en la libertad, en la diversidad, en la auto-organización, en la horizontalidad, en sentirnos pares e iguales, en democratizar la creación, en la libertad de expresión y pensamiento, y como nacimos compartiendo, creemos en compartir la mayor riqueza que atesoramos como humanidad: la cultura, las ideas y el conocimiento, que liberados del lastre analógico y anacrónico de la escasez, sólo queda liberarlos del pesado lastre de la codicia.
Cultura Libre // Redes P2P // Privacidad en Internet // Música Colaborativa // Acceso Abierto // Redes Sociales // Netlabels // Redes Libres // Crisis del Derecho de Autor // Licencias Libres // Educación y Acceso // Medios Alternativos // Turismo P2P // Torrents // Software Libre
y más!
Es el Sábado 12 y el Domingo 13 de Marzo de 2011 de 12:30 a 19:00 en Multiespacio OnceLibre, Pueyrredón 19 tercer piso (¡ojo, que se sube por escalera!), Ciudad de Buenos Aires.
Habrá Charlas, Installfest de Sofware Libre, Música, Proyecciones, Talleres, Olla popular, WiFi libre. El programa se actualiza constantemente en el wiki del Partido Pirata.
/// Charlas ///
Durante las dos tardes se estarán dando charlas sobre Cultura Libre, Software Libre, Música Colaborativa, Redes Sociales, Netlabels, Crisis del Derecho de Autor, Acceso Abierto, Educación y Acceso, Viajeros P2P, Torrents… en el wiki figuran las charlas confirmadas.
Por Articultores/OnceLibre:
Judith Villamayor, Martín Maistrello, Federico Schwindt, Agustín Rodríguez y Agustín Huarte
/// Música ///
Performance sonora durante el Domingo 13 a partir de las 17hs (después de la charla de Netlabels, a cargo de:
17:00 a 17:45 Juan Farcik (808m, AR)
18:00 a 19:00 Jin Yerei (808m, AR)
19:00 a 19:20EYE (Guido Flichman) + invitados (Cine Shampoo, AR)
19:20 a 20:00Artista Sorpresa que llega desde Italia!20:00 a 20:30 Juan José Calarco (Impulsive Habitat, AR)
20:30 a 21:00 Joaquín Gutiérrez Hadid (Impulsive Habitat, 808m; AR)
/// Install Fest ///
Para la instalación de software libre traé tu compu (entera, con monitor) o notebook, y la gente de la Comunidad Ubuntu Argentina te instala Ubuntu gnu/linux en tu PC.
/// Olla Popular ///
Articultores / OnceLibre organizan una Olla Popular, tenés que traer vasos, plato y cubierto, (que no sea descartable).
/// WiFi libre ///
La comunidad de Buenos Aires Libre nos conecta con WiFi libre durante todo el evento.
/// ¡Ayudanos a difundir el evento! ///
Por favor ayudanos a promocionar el PirateFest, que está hecho a pulmón por la gente del Partido Pirata Argentino, y la colaboración de todos estos grupos y organizaciones:
Debemos recordar siempre que la historia de la confrontación de nuestro clásico universo del copyright con el medio digital ha sido más bien una triste historia de la resistencia ludita, que un ejemplo de compromiso inteligenteFrancis Gurry, director de la Organzación Mundial de la Propiedad Intelectual
En septiembre de 2009 Fede Heinz se preguntaba desde el título de una entrada en Via Libre¿Podemos rescatar a la OMPI? Haciendo referencia a un aparente (o incipiente) cambio de ideas en seno de dicha organización, comparando los discursos del director de la OMPI de 2008 y 2009, nos comenta mientras que el primero afirma tajantemente que la innovación y la producción de obras serían imposibles sin «propiedad intelectual», y aboga por su protección a rajatabla, el segundo se limita a recalcar que «un sistema equilibrado de propiedad intelectual puede contribuir a estimular» ambas tareas.
El artículo menciona también como síntomas de cierto cambio, la adopción del “Programa de la OMPI para el desarrollo”, cuyo objetivo consiste en atender las necesidades de desarrollo de los países menos industrializados (que tienen su propia agenda en materia de propiedad intelectual), y el “abandono” del foro por parte de EEUU, Europa y Japón, que transladaron sus esfuerzos hacia otros ámbitos todavía más permeables a su influencia, como la OMC o los tratados de libre comercio, donde el levantamiento de barreras arancelarias se negocia a cambio del refuerce de barreras inmateriales. Pero incluso hasta esos ámbitos resultaron demasiado democráticos a ciertos intereses, como para inventarse el ACTA, el último intento de presionar globalmente por regímenes legales más duros.
Si bien, tal como señala el artículo, el estatuto sobre el cual esta fundada la OMPI (la defensa de la propiedad intelectual), o el origen de su finaciamiento (proveniente mayormente de la industria) invalidan cualquier posibilidad de ver surgir desde allí políticas alternativas concretas, “contrarias” a la propiedad intelectual, parece que si es posible encontrar, una insólita fuente de legitimación discursiva.
Aggiornando el discurso
Francis Gurry, director de la OMPIha pronunciado hoy una conferencia que permite ver que tan lejos se puede llegar con los aggiornamientos. El evento que sirvió de contexto se llamó “Blue Sky. Future Directions in Copyright Law”, realizado en Sydney, Australia, de perfil revisionista: uno de sus organizadores, el Profesor Brian Fitzgerald de la QUT Faculty of Law, tiene su propio tag en el sitio de Creative Commons Australia con numerosas apariciones.
Por parte de vos, Miguel de Cervantes, nos fue hecha relación que habíades compuesto un libro intitulado El ingenioso hidalgo de la Mancha, el cual os había costado mucho trabajo y era muy útil y provechoso (…) Os damos licencia y facultad para que vos, o la persona que vuestro poder hubiere y no otra alguna, podais imprimir el dicho libro (…) So pena que la persona o personas que sin tener vuestro poder lo imprimiere o vendiere: o hiciere imprimir o vender, por el mesmo caso pierda la impresión que hiciere, con los moldes y aparejos de ella: y más incurra en pena de cincuenta mil maravedís cada vez que lo contrario hiciere… Fecha en Valladolid a veinte y seis días del mes de Septiembre de mil seiscientos y cuatro años.
Yo el Rey.